He llegado a una conclusión: el sexo, forma parte de mi vida sin él, no sería vida.
Estaba demasiado cansado, había llegado de trabajar a casa y como siempre, ¡tarde!. Eran eso de las diez de la noche. Lo primero que hice fue encender el ordenador, quitarme la ropa dejándola tirada por todo el piso e ir directamente a la ducha para despejarme, como siempre la ducha me revive. Tenía el ordenador preparado automáticamente para que entre al chat, decido no vestirme puesto que ya tengo un mensaje. Me encantó el nombre de usuario que tenia "sexorealya".
Lo primordial era saber los roles de cada uno, la verdad yo no me corto ni le hago asco a nada. Por lo que iba leyendo, él tampoco le hacia asco a nada, mejor. Decidimos mutuamente pasarnos fotos, en la cuales cada uno estábamos desnudo, puedo observar que tiene un rabo enorme, grueso y venoso, perfecto para mi, tiene un culo trabajado por el gimnasio y porsupesto unos pies enorme, me fascinan los pies. Al recibir él mi foto, exclamó que le gustaba mi culo y que estaba deseando comérmelo y dejarme seco y exprimido, cada palabra escrita que leía me ponía mas cachondo.
Me propuso quedar en su casa y yo sin dudarlo acepto, estaba tan cachondo que mientra me iba poniendo los vaquero tenia que mover la polla a un lado para que me entrasen los vaqueros, cojo las llaves y bajo al garaje para coger el coche. Mientras iba conduciendo me iba imaginando lo que me esperaba, era como una película, cada lamida, cada beso, cada mamada imaginada me ponía cachondisimo, en todo el camino fui con la polla dura.
Una ves en su portal toqué el timbre, me abrió la puerta y subí a su casa, creí recordar que vivía en un cuarto, claro que eso no es importante, ya que ni siquiera recordaría su nombre, la verdad es que ni se lo pregunté, me daba absolutamente igual, total luego no le volvería a ver, ya que tengo mi propia normal: no repetir con el mismo dos veces. Salí del ascensor y vi su puerta abierta, entré y le vi tumbado en el sofá. Haciendo un barrido de arriba abajo, logré ver que tiene unos pezones perfectos puntiagudos, sus pectorales están tan fibrados y musculados y por supuestos unas impresionantes abdominales, seguí bajando y pude ver el inmeso rabo que tenía, la verdad que en persona era mas grande, me abalancé a comérselo, empecé por la cabeza y cuando acordé tenía metida su polla hasta mis pulmones, el sabor que soltaba su rabo era riquísimo, me di cuenta que empezaba a lubricar un montón, sigo comiéndome su rabo, con una mano subía y bajaba su prepucio, mientras mi mano bajaba mi boca se deslizaba hasta abajo dejándome sin aire, las arcadas ya no me venían,yo diría que era por la experiencia cogida a lo largo del tiempo. Me quitó la camiseta, los vaqueros y sin darme cuenta yo ya estaba a cuatro patas, empecé a notar su lengua en mi ano, cada lamido que me daba, me hacía gemir, me daba un montón de placer, ¡Dios mio! su lengua era una máquina, me introducía la lengua hasta el fondo, me lamía haciendo circulo de arriba abajo, a los lados, tenía una lengua increíble, sobrenatural, ¡No quería que parase! siguió lamiéndome el ano, durante un un buen y largo rato, pasó a la acción y noté como me fue metiendo su enorme y grueso rabo, se notaba que tenía experiencia lo hacía tan despacio y suave que podía sentir cada centímetro que me iba introduciendo. Hasta que su enorme rabo llegó al final y rompí de placer con un gemido grito, ahhh! Me encantaba poder sentir como su rabo entraba y salía, pero sobre todo me encantaba cuando estaba dentro,pude notar que estaba a punto de correrse en ese momento al igual que yo, noté como se corrió dentro de mi, fue un placer extremo poder correrme a la ves que él, descargando un montón de leche y eso que había follado el día anterior.
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